Selva Almada se presenta en Rosario con una charla abierta sobre literatura y paisajes culturales
El viernes 4 de julio, en la Biblioteca Argentina, la escritora expondrá sobre su obra y su experiencia como gestora cultural, con entrada libre y gratuita.
El viernes 4 de julio a las 17 h, la reconocida escritora Selva Almada ofrecerá una charla en la Biblioteca Argentina (Pte Roca 731), con entrada libre y gratuita. El eje temático de la conversación girará en torno a "Paisajes culturales: Literatura y gestión librera desde los imaginarios fluviales".
La autora desarrollará su exposición basada en dos líneas principales: la escritura de los paisajes culturales en algunas de sus narraciones de ficción y no ficción y su experiencia como gestora cultural a través de la configuración de nuevos circuitos de circulación de la literatura escrita en las provincias argentinas. Ambas prácticas, narración y gestión cultural, pueden situarse a partir de lo que escritora imaginó como zona fluvial.
La actividad es organizada por las Cátedras Teorías de la Cultura y Análisis del Texto (com. 3 y 5) de la Facultad de Humanidades y Artes de la UNR, junto con la Biblioteca Argentina y el Proyecto de Investigación Relatos culturales sobre naturaleza-cultura en el Litoral, y cuenta con el apoyo de la Escuela de Gestión Cultural, la Escuela de Letras y la Maestría en Estudios Culturales (UNR).
Sobre Selva Almada
Nació en Villa Elisa en 1973 y es una de las escritoras más renombradas del escenario literario argentino. Comenzó estudios de comunicación social, pero la vocación literaria hizo que reorientara su perfil profesional. Actualmente, cuenta con más de diez libros publicados entre novelas, cuentos, crónicas y otros de no ficción.
Su primera novela fue El viento que arrasa (2012), elogiada por el público y la crítica, le siguieron: Mal de muñecas (2003); Una chica de provincia (2007); Ladrilleros (2013); Chicas muertas (2014); Los inocentes (2020), entre otros, que posicionaron a Almada como una de las narradoras más notables de su generación.
Su crónica de no ficción Chicas muertas, acerca de tres feminicidios ocurridos en la Argentina en la década de los ochenta, la consolidó como escritora feminista y fue traducida a los idiomas francés, inglés, italiano, portugués, alemán, holandés, sueco, noruego y turco.