27 de noviembre

Distritos

Inclusión

Jóvenes del distrito Oeste cuentan con un espacio de integración: el Circo Social

Funciona desde hace cuatro años en el Centro de Convivencia Barrial 23 de Febrero, ubicado en Maradona y Espinillo. Se realizan diversas actividades, como tela, trapecio, acrobacia y malabares.

Gestado hace 4 años, en la esquina de Maradona y Espinillo funciona el espacio «Circo Social», donde más de 10 chicos oriundos de los barrios 23 de Febrero y Toba, pasan sus horas haciendo saltos acrobáticos, escalando entre las telas o moviéndose en el trapecio. No hay límite de edad para venir, aunque mayoritariamente se trata de adolescentes de entre 12 y 16 años.

"Siempre pensamos que el circo es un estilo de vida, no una técnica. A través de esto los chicos pueden conocer otra gente, otros lugares, incluso pueden trabajar de esto, haciendo funciones o dando clases", explica Aarón Lescano, coordinador del proyecto que tiene lugar en el Centro de Convivencia Barrial 23 de Febrero (también sede del programa Nueva Oportunidad), al tiempo que explica que Circo Social se enmarca dentro de las actividades de la Escuela Municipal de Artes Urbanas.

"Laburamos lo que va pasando con los chicos en su vida cotidiana, en su día a día. Los acompañamos con sus situaciones particulares", asegura Aarón. Hay algunos que se sumaron el primer día y hoy siguen, lo que les permite desarrollar trabajos más profundos, incluso preparar funciones más allá del espacio del CCB.

"Con el grupo más antiguo estamos haciendo las muestras anuales y shows en otros lugares, como en el Parque Independencia", agrega el coordinador del proyecto.

Dos de los que vienen desde siempre son los hermanos Ruth y Lucas Cano, quienes aseguran que hacen circo "para todo el barrio". Ella se especializa en tela y trapecio, él suma acrobacias y malabares en su repertorio.

Una vez por mes, el elenco de Circo Social organiza una función para los vecinos del barrio. "Está bueno porque pueden venir chicos que por ahí no pueden pagar por un espectáculo", dice Lucas.

Los chicos invitan a sus vecinos para que se sumen al grupo. "Estamos todos los martes y jueves de 15 a 16:30 en Maradona y Espinillo, los esperamos", concluyen.

Así como el CCB 23 de Febrero, la Municipalidad posee otros 30 espacios similares donde se promueven actividades para niños, jóvenes y adultos mayores. Están ubicados en los barrios de mayor vulnerabilidad de la ciudad y allí se desarrollan instancias de capacitación, recreación, consultoría legal y de salud, entre otras.