22 de noviembre

Adultos mayores

Desarrollo Humano
Coronavirus

Ser grande en pandemia: Educación permanente y movimiento, oportunidades para una vejez activa

Continúa el ciclo municipal de charlas a cargo de especialistas para visibilizar y promover el respeto de los derechos de adultas y adultos mayores, y su acompañamiento en época de aislamiento.

Luego de un auspicioso debut el pasado viernes, continúa el ciclo de conversaciones que forma parte de ¡Qué grande octubre!, la agenda virtual de actividades que ideó la Municipalidad de Rosario para celebrar el mes de las adultas y adultos mayores. Durante los encuentros, profesionales y especialistas en gerontología brindan herramientas a toda la comunidad para acompañar a la población de alto riesgo, en contexto de pandemia y aislamiento social. 

La iniciativa se puso en marcha el 16 de octubre con la charla Amor y afectividad en tiempos de aislamiento, a cargo de María Sol Dimas Ruiz; la siguiente tendrá lugar el 23 de octubre a las 19, ocasión en que Pablo Urbaitel abordará la relación entre envejecimiento activo y educación permanente, en tanto la tercera cita está prevista para el 6 de noviembre y será llevada adelante por Ignacio Franceschetti, quien se explayará sobre la importancia del movimiento durante el aislamiento para las y los adultos mayores. Las conversaciones se transmiten en vivo por el canal de Youtube de la Municipalidad de Rosario, donde quedan alojadas para que se sigan disfrutando.

Desterrar la idea de viejismo

“El concepto de envejecimiento activo fue propuesto por la Organización Mundial de la Salud y tiene como finalidad romper con la asociación que comúnmente se hace de vejez y enfermedad”, explicó Pablo Urbaitel, quien integra el equipo de gestión de la Dirección de Adultas y Adultos Mayores.

“El envejecimiento activo trata de desterrar la idea de viejismo, entendido como todos los prejuicios, estereotipos y discriminaciones en función de la edad, la creencia de que los adultos mayores no pueden, o carecen de capacidades cognitivas, porque están terminando su vida y no tienen posibilidad de construir proyectos de vida nuevos”, agregó.

“Lo que plantea la idea de envejecimiento activo es la optimización de oportunidades no solo vinculadas a la salud, sino al movimiento, a lo social, a lo cultural, y a la estimulación cognitiva, con el objetivo de mejorar la calidad de vida de las personas mayores”, amplió el doctor en Ciencias de la Educación y docente en la Universidad Nacional de Rosario.

En cuanto a la educación permanente, el otro eje de su charla, Urbaitel destacó que está muy asociado al concepto integral del envejecimiento activo, porque “apunta a que la educación no es un proceso que termina con la escolarización o con los estudios institucionalizados, sino que aprendemos toda la vida, nunca dejamos de hacerlo”.

De este modo, enfatizó: “Todas las personas tienen derecho a tener su propio proyecto y a organizar su vida en relación a sus intereses, y las posibilidades de educación son una faceta más dentro de este fenómeno. Uno puede querer estudiar por muchas cosas, porque reconstruyó un objetivo o un proyecto de vida, porque retomó algo que en su etapa laboral o en la juventud no pudo hacer. Puede querer estudiar por necesidad, por querer aprender algo que le resulte de utilidad, pero también puede hacerlo de una manera no utilitaria, por placer, por el deseo de conocer algo que le resulte de interés”.

En sintonía con estas afirmaciones, y ya ubicados en el contexto impuesto por la pandemia del Covid-19, el docente se refirió a las estrategias que desde el área tuvieron que poner en marcha frente a las disposiciones de aislamiento y distanciamiento, y las indicaciones de las autoridades de extremo cuidado, especialmente dirigidas a esta población. “Nos vimos obligados a rediseñar nuestras propuestas, y como ocurre en este tiempo de aislamiento social, todo está atravesado por el acceso y las posibilidades de conectividad de cada población de adultos y adultas mayores, y en base a eso tenemos distintas actividades”.

Y enumeró: “Tenemos una revista mensual que propone actividades cognitivas y recreativas con la intención de llegar a la población que no tiene acceso a internet o a ninguna tecnología; tenemos grupos de WhatsApp que fomentan el intercambio y la participación, y también tenemos un programa radial que se llama Frecuencia Mayor, y un programa que se sube a nuestra página de Facebook y YouTube, Frecuencia Mayor en vivo, que es un programa de televisión para adultos mayores”.

Además, se ofrecen propuestas que estimulan la pintura, el dibujo, la escritura, el teatro, y actividades recreativas con juegos, remarcó el profesional y subrayó, a su vez, que hay un espacio virtual de participación para que los adultos mayores puedan subir y compartir sus producciones.

Urbaitel, finalmente, señaló que, en muchos casos, los derechos de las adultas y los adultos mayores son vulnerados, e hizo referencia a los bajos ingresos y las dificultades para lograr una vivienda acorde o hacer uso de los servicios de salud, a la par que también señaló que lo mismo ocurre cuando son subestimados en cuanto a su autonomía, y a su capacidad de decidir. Y recordó la importancia de seguir promoviendo el conocimiento y el respeto de los derechos de los adultos y adultas mayores declarados por Naciones Unidas, que contemplan el derecho a ser independientes, a la participación, a recibir cuidados, el derecho a hacer actividades que le permitan la realización personal, a la par que enfatizó: “Y eso tiene que ver con cómo garantizar el acceso a la educación, a la cultura, a la actividad física, y el derecho a vivir con dignidad”.

Más fuertes y en movimiento

El 1º de octubre es el Día Internacional de las Personas Mayores instituido por la ONU en 1990 para reivindicar sus derechos y erradicar los prejuicios sociales sobre este colectivo. En sintonía, como política pública, el municipio sostiene desde hace muchos años una agenda de propuestas que se extiende a lo largo de ese mes, con actividades que promueven el conocimiento de los derechos de esta población.

Este año, bajo el lema ¡Qué grande octubre!, se organizaron estos conversatorios destinados a toda la comunidad, el tercero de los cuales estará a cargo de Ignacio Franceschetti, licenciado en Educación Física y Deportes, y trabajador de la Dirección de Adultas y Adultos Mayores. El 6 de noviembre a las 19, por el mismo canal de Youtube, el profesional dará la charla titulada La importancia del movimiento durante el aislamiento para las y los adultos mayores.

“La actividad física en el adulto mayor es un requisito indispensable, sea cual sea la situación. La actividad física promueve la función muscular que conlleva a que sean independientes, por lo tanto, a que sean menos frágiles ante situaciones como diabetes, enfermedades cardiovasculares, menor riesgo de caídas, fracturas, deterioro cognitivo y depresión”, indicó Franceschetti, que además es kinesiólogo, fisiatra y especialista en medicina del deporte y del entrenamiento.

Como coordinador del área socio-educativa de la dirección que depende de la Secretaría de Desarrollo Humano y Hábitat, y a cargo de los diferentes distritos de la ciudad, su labor está dirigida al fortalecimiento del nexo entre la dirección y los educadores que cumplen su función en territorio. En este sentido, el profesional destacó la importancia del rol de “los profes”, ya que no solo promueven la actividad física, la danza y el teatro, y las propuestas cognitivas, sino que principalmente jerarquizan la cuestión social y vincular.

“El vínculo inicial y entre pares es lo que genera adhesión y que ellos se consoliden como grupo”, afirmó y consideró que las iniciativas del área, entre las que se cuentan talleres de actividad física, de danza y folclore, de teatro, de arte, de memoria, de canto y literario, “son diversas y están pensadas desde una mirada integral”.