Más de 500 vecinas y vecinos participaron del cierre de los talleres culturales en el distrito Oeste

Bajo el lema Los sueños son la meta y la imaginación el transporte, el viernes 7 de noviembre se concretó, en la sede del Centro Municipal Distrito Oeste, el cierre de los talleres culturales dictados durante 2014. En tres ámbitos abiertos en simultáneo (Punto Oeste, Sala de Usos Múltiples y el Patio Cívico) del minimunicipio Felipe Moré, los alrededor de 80 espacios culturales que funcionaron a lo largo y ancho de la jurisdicción despidieron un año de trabajo, compromiso e integración en un multitudinario encuentro.

Desde las 14, más de 500 personas de todas las edades se acercaron a participar y compartir una tarde plagada de propuestas recreativas en los cómodos y funcionales espacios físicos de la sede distrital oeste de avenida Presidente Perón 4602, como parte del cierre de talleres culturales 2014 votados en el Presupuesto Participativo.

Durante la jornada, estuvieron presentes la subsecretaria de Cultura y Educación, Mónica Peralta; el director del CMD Oeste, Gustavo Sader; y la coordinadora del Área de Cultura Oeste, Marcela Valdata, todos ellos junto a funcionarios, talleristas y referentes de instituciones barriales para mostrar y compartir abiertamente las propuestas culturales y recreativas por las que transitaron más de dos mil vecinos de la zona en el presente año.

Punto Oeste

Una de las postas culturales de la tarde fue el Punto Oeste, aula digital joven del distrito, donde se instrumentaron diversos talleres vinculados al uso de nuevas tecnologías. Allí, los jóvenes que participaron de la propuesta Revista Digital proyectaron sobre la pared una síntesis de la publicación en la que trabajaron colectivamente a lo largo del año. A la vez, se exhibieron algunas creaciones audiovisuales de los niños del Centro de Convivencia Barrial Santa Lucía que trabajaron con el espacio De película.

A pocos metros de allí, en el hall cercano al aula digital, también se expusieron algunos trabajos realizados por los niños, jóvenes y el profesor del taller de ilustración que se desarrolló en tres espacios del distrito.

Patio Cívico

Llegando a la explanada del minimunicipio, se podía observar un enorme escenario donde los alumnos de diversos bailes y disciplinas mostraron lo aprendido en sus talleres, luego de arribar al lugar acompañados de sus familias, con atuendos y maquillajes especiales para la ocasión. Así, bajo un sol radiante, se desplegaron en el escenario los grupos de todas las edades que participaron de los talleres de hip hop, percusión, cumbia cruzada, folclore, danza árabe y brasilero, dictados en decenas de instituciones de la zona.

Sala de Usos Múltiples

Mientras tanto, en el SUM del distrito, coloridos stands destacaban las producciones del taller Fiesta de Lectura y Convivencia, con numerosos libros, dibujos y creaciones realizadas por los más pequeños del oeste en sus espacios de cuentos. También se podían observar juguetes, objetos y accesorios realizados en el marco del taller de reciclado que realizaron los educadores de los centros de Convivencia Barrial de la zona, o aquellos que crearon un grupo de mujeres en el taller de Libro-Objeto del distrito.

En otro sector del salón, con el soporte de dibujos y texto, se presentó un entretenido cuento en el que trabajaron docentes, talleristas y estudiantes de la Escuela Bilingüe Nº 1333, recuperando las costumbres y las historias de la cultura Qom. A metros de allí, se expusieron prendas y carteras confeccionadas en la Escuela de Diseño de Indumentaria, que desarrolló talleres en numerosas instituciones de la ciudad, con propuestas de diseño, moldería y estampas. Cabe destacar que un numeroso grupo de vecinos que integran estos talleres protagonizaron un minidesfile al aire libre, exhibiendo prendas urbanas y elegantes, mientras los presentes acompañaban con las palmas.

En tanto, el espacio más cautivante por el silencio y respeto que imponían los protagonistas fue el salón de ajedrez, donde muchos niños y jóvenes se acercaron a compartir torneos como muestra de la gran impronta que tuvo el deporte-ciencia en las escuelas del Oeste.

También a lo largo de la jornada el tallerista de serigrafía fue estampando imágenes alusivas al encuentro en remeras y retazos de tela, para que todos los presentes puedan llevarse un recuerdo del encuentro barrial.

Simulando un miniteatro, se presentaron en el SUM las integrantes del taller de yoga de la Vecinal Villa Urquiza, y más tarde se arrimaron los pequeños del Centro de Convivencia Barrial La Lagunita con una entretenida propuesta de radioteatro, desarrollada como parte del taller de lenguajes expresivos. Otro momento emotivo de la tarde llegó de la mano de un grupo asistente al taller de literatura del Centro de Jubilados Alas de Vivir, cuyos integrantes leyeron conmovedores relatos y poemas de su autoría.

El mismo grupo de abuelos protagonizó más tarde una varieté de teatro y circo y deleitó a todos los presentes con tres escenas surgidas en el marco de un entretenido taller de teatro. Y también se acercaron a mostrar lo aprendido algunas chicas del Centro de Convivencia Barrial 23 de Febrero, con una propuesta dirigida a los jóvenes.

A su vez, globos, banderines, dibujos, cuentos y juguetes de colores ambientaron el lugar por el que transitó durante toda la tarde un animador y cuenta-cuentos representando una llamativa la figura de “la muerte”.

El cierre de la jornada cultural fue a puro folclore en la explanada, donde los niños y adultos se animaron a bailar chacareras, zambas y gatos vestidos como gauchos y paisanas. De esta manera, se dio pie a un número musical a cargo del grupo Late Bombo y Gabriel Conde, quienes deleitaron a todos los vecinos y despidieron la tarde con las mejores versiones del cancionero popular.